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¿Quién nos mira? ¿Quién controla los mandatos? Bueno, esa es la pregunta compleja, y creo que ahondar en la educación nos la respuesta. No hay algo así como el mal representado en alguien o algo fundacional, pero sin duda la historia de nuestra libertad fue cercenada en diferentes momentos, y para eso se necesitó de la construcción de arquetipos que sirvieran para diferenciar a las buenas de las malas mujeres. Este libro busca trasladarlas a ustedes, lectoras, a cada uno de esos momentos en donde los arquetipos se conformaron, y que podamos descubrir juntas cómo esos mandatos funcionan hoy, y lo que acarrean.
Sinopsis
La mala educación nos hizo buenas para los demás. Ahora toca serlo para nosotras.
Buenas esposas, concubinas, amantes, hijas, madres. Siglos de (mala) educación han insistido en formar a las mujeres como buenas servidoras, siempre al servicio de otro. Incluso cuando la escuela estaba fuera de su alcance, estas enseñanzas inorgánicas se repetían hasta convertirse en un sustrato permanente que todavía a día de hoy impulsa a las mujeres a cumplir miles de mandatos.
Esto es lo que sostiene María Florencia Freijo en (Mal) Educadas: que las mujeres han sido y aún son preparadas, tanto desde la educación formal como la informal, para amar sin condiciones a riesgo de quedarse solas, para limitar su propio poder y para ceder sus espacios y libertades. Con una aguda mirada histórica y una escritura lúcida y personal, la autora encuentra en esta mala educación el hilo que ha unido durante siglos, y aún sigue uniendo, los destinos de muchísimas mujeres que siempre merecieron más.