Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Sinopsis
«Me arrepiento de los platos deliciosos rechazados por vanidad...
Isa bel Allende (1942), de nacionalidad chilena, nació en Lima. Ha trabaja do infatigablemente como periodista y escritora desde los diecisiete a ños. La casa de los espíritus (1982) la situó en la cúspide de los nar radores latinoamericanos e inauguró una brillante trayectoria literari a que, con los años, no ha dejado de acrecentar su prestigio. Entre su s obras, cabe mencionar Eva Luna, Cuentos de Eva Luna, El plan infinit o, De amor y de sombra, Paula, Afrodita, Hija de la fortuna, Retrato e n sepia, Mi país inventado, El zorro, Inés del alma mía, La suma de lo s días, La isla bajo el mar y la trilogía «Las memorias del Águila y d el Jaguar» (integrada por La Ciudad de las Bestias, El Reino del Dragó n de Oro y El Bosque de los Pigmeos) .
«Me arrepiento de los platos d eliciosos rechazados por vanidad, tanto como lamento las ocasiones de hacer el amor que he dejado pasar por ocuparme de tareas pendientes o por virtud puritana, ya que la sexualidad es un componente de la buena salud, inspira la creación y es parte del camino del alma... Por desg racia, me demoré treinta años en descubrirlo.»