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Sinopsis
...Recuerdo que, de niña, antes de acostarme, me sentaba en las rodillas del abuelo Laertes y él dejaba que acariciara su barba blanca y recorriera con los dedos las arrugas y las cicatrices que adornaban su rostro solemne. Luego el abuelo decía para sí: Ha sido el miedo. El miedo al persa, el horror a perder la libe rtad, lo que ha hecho que Esparta se convierta en lo que es ahora. Es el miedo la causa de que ya no haya tiempo para la música o la poesía...