Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Sinopsis
«Me llaman el Guardián. Hubo un tiempo en que estaba del lado de la ley. Ahora... digamos que estoy al margen.
Dime cuál es tu veneno preferido y te lo conseguiré. ¿Aliento de hada? ¿Vid del sueño? El Guardián los tiene todos. Estás en los bajos fondos de Rigus, la ciudad más próspera de las Trece Tierras, donde las ratas salen mientras la gente honrada duerme, y la guardia hace la vista gorda.
Admito los trapicheos, los rateros, los adictos y los matones callejeros. Pero ahora han asesinado a una niña y a nadie parece importarle. Así que tendré que tomar cartas en el asunto. Es en momentos como éste cuando necesitas conocer a las personas adecuadas. Y todos le deben algo al Guardián.
No soy ningún héroe. Así están las cosas. Bienvenido a los bajos fondos.»