Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Sinopsis
Para los egipcios, fue una diosa viviente. Para los macedonios, una reina. Los romanos la consideraban un ?ser monstruoso?. Pascal escribió que la forma de su nariz cambió la historia del mundo. Shakespeare la retrató como un icono del amor trágico. Elizabeth Taylor, Catherine Zeta Jones o Angelina Jolie han representado su papel en películas. Pero, ¿quién fue Cleopatra en realidad?Fue la última soberana de la dinastía Ptolemaica macedonia, que había gobernado Egipto durante tres siglos desde la esplendorosa y multicultural Alejandría, la mayor ciudad del Mediterráneo. Despiadada en el trato con sus enemigos, incluso con los de su propia familia, Cleopatra supo gobernar su reino en medio de grandes dificultades y casi triunfó en su intento de crear un imperio oriental capaz de rivalizar con el creciente poder de Roma. Extraordinariamente inteligente, sus mitificadas relaciones con Julio César y Marco Antonio tuvieron una vertiente más política que amorosa.