Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Sinopsis
Durante casi dos décadas, Scott Jurek ha sido una de las figuras dominantes y más queridas en el extenuante y cada vez más popular deporte de la ultracarrera. Desde que en 1999, siendo un completo desconocido, liderara la carrera de resistencia de los estados del oeste de Estados Unidos, sus logros le han situado en la élite de los corredores: ganó esa carrera durante siete años consecutivos y consiguió marcar el mejor tiempo, logró en dos ocasiones la victoria en el ultramaratón de Badwater (un «paseo» de casi 220 km por el valle de la Muerte) y recientemente ha establecido un nuevo récord americano al recorrer 270 km en 24 horas (seis maratones y medio en un solo día).
En Correr, comer, vivir, Scott Jurek habla sobre su vida y su carrera y sirve de inspiración a corredores de todos los niveles. Desde su infancia en el Medio Oeste americano, sus comienzos en el deporte (lo odiaba) hasta la lenta transición hacia el veganismo, pasando por sus carreras, que han roto todos los récords, la historia de Scott es la de una persona con una voluntad de hierro y que pone en entredicho muchos de los estereotipos sobre los atletas.