Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Sinopsis
Tras Shenzhen y Pyongyang, Guy Delisle cuenta en Crónicas birmanas su vida cotidiana en Rangún. Acompañando a su pareja, miembro de Médicos Sin Fronteras, durante un año en Birmania, Guy Delisle regresa con un documental gráfico apasionante. Testigo curioso y de mirada aguzada, el autor mezcla su propia historia con la del país. Con una buena dosis de ironía confronta sus insignificantes preocupaciones de occidental con las dificultades que atraviesan los habitantes de un país pobre bajo el yugo de una dictadura militar.
Tras la aparente tranquilidad de las calles de Rangún despuntan las injusticias y carencias impuestas por la junta militar, los efectos de la censura, las zonas prohibidas, los rumores, la desinformación y el miedo permanente. A través del relato de Delisle se puede apreciar mejor la realidad de la pequeña comunidad internacional que trabaja para las ONG y las tremendas dificultades que encuentra para llevar a cabo su misión. Un retrato emotivo y comprometido de Birmania.