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Sinopsis
Este libro nació con el encargo de servir como introducción a la literatura para quien desee asomarse a ella. Por el camino, sin embargo, Suso de Toro se desprende del corsé del ensayo para ofrecernos la posibilidad de participar en un diálogo: con los muertos -y por sus páginas desfilan Joyce, Proust, Woolf o Rosalía de Castro-, con nosotros mismos -entrenando nuestra conciencia crítica de lectores y liberándonos de la culpa canónica: se puede no haber leído hasta el final La montaña mágica, de Thomas Mann-, y con él, con el escritor que conoce a fondo su oficio y que reconstruye su propia carrera literaria para encontrar en sí las claves de lo que hace a quien escribe un autor: los ritos de paso, el vínculo con la propia lengua, las traiciones a que obliga el mercado, la relación con la sociedad, con la comunidad lectora viva y con la posteridad, y la alquimia que convierte en obra literaria el sustrato de lo real y lo imaginado. Al fin y al cabo, como él mismo dice, «cualquier cosa puede ser una semilla inesperada para la literatura si se da la coincidencia de que nosotros seamos la tierra apropiada».