Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Sinopsis
Con un estilo que algunos han calificado de «realismo alucinatorio», Dog Soldiers National Book Award del 1975 nos lleva a Saigón en los últimos días de la guerra de Vietnam. Allí, Converse, un periodista de tercera en busca de experiencias, se embarca en el tráfico de tres kilos de heroína con ayuda de un exmarine, Hicks, que se encargará de transportarla. Sin embargo, de vuelta en EEUU, descubre que su mujer y Hicks han desaparecido con la droga huyendo de un corrupto policía federal que pretende utilizar a Converse para dar con ellos. Se inicia entonces una persecución frenética por media California que es uno de los retratos más escalofriantes del inhóspito panorama moral de un país que había dejado ya muy atrás la paz y el amor: gurús venidos a menos, hippies entregados a la violencia, especímenes hollywoodienses, yonkies deshauciados, pseudointelectuales en caída libre, y una clase política y periodística absolutamente corrompidas. Todo ello con un ritmo brutal y una mirada despiadada que sitúan Dog Soldiers en un puesto de honor dentro de esa tradición que va de Conrad a Hemingway, de Peckinpah a Cormac McCarthy. Sin lugar a dudas, un imprescindible clásico moderno.