Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Sinopsis
Cuando Japón inició las hostilidades contra Estados Unidos en 1941, la mayor parte de sus líderes comprendieron que estaban entrando en una guerra que seguramente perderían. Basándose en documentos prácticamente desconocidos hasta ahora, Eri Hotta plantea una pregunta esencial. ¿por qué esos hombres pusieron innecesariamente en peligro a su país y a sus ciudadanos? a través de los personajes que llevaron al país a la conflagración, la autora nos muestra un Japón oculto que deseaba evitar la guerra, pero estaba plagado de tensiones con Occidente, cegado por un militarismo temerario que descansaba en nociones tradicionales de orgullo y honor, y tentado por el insensato sueño de una gran victoria, por improbable que fuera. Retrata uan cúpula de poder llena de ambición territorial y arrogancia. muchos de los que trataron de evitar la guerra con Estados Unidos siguieron apoyando el expansionismo asiático, esperando continuar, la ocupación de China que ocmenzó en 1931, y sin querer aceptar la creciente repulsa de Washington respecto a sus incursiones continentales...