Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Sinopsis
El medio milenio transcurrido desde la aparición de La Celestina no ha conseguido armonizar la diversidad de interpretaciones que la obra cosechó ya entre sus primeros lectores. Pero esa "discordia" o "contienda", de la que se lamenta Rojas en su prólogo, está alimentada justamente por la actitud del autor, quien, si por una parte muestra una machacona y sospechosa insistencia en la finalidad moral del libro, por otra, su paradójica intención de narrar y aun recrearse en los episodios eróticos sume al lector en la perplejidad. Semejante ambivalencia ( que Cervantes dejó traslucir al calificar el libro de "divino, si encubriera más lo humano") parece consustancial a buena parte de las obras literarias geniales y de honda repercusión en el espíritu humano.