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Sinopsis
En la década de los años 50 la sociedad parecía estar preparándose para una gran revolución. Nuevas actitudes culturales, raciales y sexuales estaban cogiendo fuerza, y en medio de todo se encontraban los cómics de EC. William Gaines y Al Feldstein usaron sus cómics bélicos, de terror y de ciencia ficción para mostrar todo aquello que les indignaba de la sociedad del momento pero sin dejar de lado el atractivo de lo prohibido o macabro. En sus intrigantes historias se atrevieron a tratar temas como la discriminación racial, el antisemitismo o la misoginia. Para ello necesitaban a artistas capaces de mostrar la crudeza del mundo real con gran detalle, sin olvidar que había que despertar el interés de los jóvenes lectores. Nadie mejor para ello que Wallace Wood, un maestro del detalle y de la línea expresiva. Con sus pinceles invadió la imaginación de miles de lectores con rudos criminales, relistas paisajes suburbanos, retratos de hombres mundanos angustiados por duros dilemas morales y, por supuesto, hermosas y sensuales mujeres de voluptuosas curvas.