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Sinopsis
Pocas historias despiertan emociones tan intensas como los mitos clásicos. Con su
profunda belleza y su admirable lucidez, las leyendas grecolatinas nos ponen en
contacto con verdades eternas y expresan a la perfección nuestras esperanzas, flaquezas
y ambiciones. Cuesta olvidar fábulas tan impresionantes como la de Aracne,
la tejedora que se creyó mejor que los dioses, o la de Narciso, el adolescente
que labró su desgracia por quererse demasiado a sí mismo, o la de Tiresias, que
fue hombre y mujer en una misma vida, o la de Orfeo, que viajó a los infiernos
porque pensaba que el amor puede más que la muerte. Todas esas leyendas, y muchas
otras, fueron narradas por Ovidio en las Metamorfosis, un libro que maravilló
a los romanos de la antigüedad y que ha dejado una huella imborrable en la cultura
de Occidente. Con sus ironías y sus tragedias, sus ninfas esquivas y sus reyes
atroces, sus amores locos y sus asombros sin fin, las Metamorfosis se nos aparecen
como un sobrecogedor retablo de la vida humana que refleja muy bien lo que somos:
juguetes del destino enfrentados a un mundo cambiante, frágiles criaturas
esclavizadas por la pasión, seres que buscan la felicidad en un camino flanqueado
de sombras