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Sinopsis
«Pensé que con Toda una vida ponía fin a mi actividad como escritor, después de más de una década de vivir esta experiencia. Pero en la vida política de este país se suceden con frecuencia acontecimientos que nos dejan perplejos y que no me resisto a comentar con la independencia que dan los años y mi situación actual, sin ningún tipo de atadura: Por qué en nuestro país no se penaliza la corrupción. Por qué los políticos dicen una cosa y hacen la contraria sin que les pase factura. Por qué la política ha alcanzado las máximas cotas de desprestigio. Por qué los políticos siguen estando aforados. Por qué estamos llegando a una situación en la que no podemos hablar de política sin enfadarnos. Por qué aún no se han terminado las guerras de Ucrania y de Gaza... Y muchas cosas más que a todos nos sorprenden. ¡Vamos a por el octavo!».