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Sinopsis
El propósito que guiaba a Bodin al escribir Los seis libros de la República era el de sentar las bases para un estudio teórico de la política, descuidada hasta entonces pese a ser la «princesa de todas las ciencias». El propio Bodin compara su empresa a la llevada a cabo, dos mil años antes, por los maestros de la Grecia clásica, si bien su referencia a las obras de Platón y Aristóteles está cargada de sentido crítico. Es preciso, en primer lugar, que la nueva teoría política se haga cargo de todas las enseñanzas suministradas por la experiencia humana acumulada durante tan prolongado período histórico. En segundo lugar, es necesario romper el velo de «tinieblas muy espesas» que ocultaban aún, en aquellos tiempos, los «misterios sagrados de la filosofía política». Sólo si se procede así será posible, por un lado, colmar las lagunas que nos legaron filósofos tan venerables y, por otro, evitar los graves errores cometidos por quienes, después, han escrito alegremente sobre los asuntos políticos y que son culpables, sobre todo, por no haber tenido «ningún conocimiento de las leyes y, ni siquiera, del Derecho público».