Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Sinopsis
El simple arte de matar es una recopilación de ochos relatos cortos más un ensayo en el que Chandler reivindica el carácter realista de la literatura detectivesca. En el ensayo «El simple arte de matar» Raymond Chandler critica a los escritores que convirtieron la literatura policíaca en un género ligero centrado en la reso lución de un enigma y reivindica la novela detectivesca realista, la llamada literatura «hard-boiled», y la obra de Dashiell Hammett, quien logró que los asesinatos fueran más humanos. Esta edición, inédita en España y que presenta traducciones completamente nuevas, recoge el célebre ensayo seguido de los ocho relatos pulp previos a su primera novela que el propio Chandler escogió para que fueran reeditados en 1950 en un volumen homónimo.«Chandler no escribía sobre crímenes, o sobre detectives, y siempre insistió en ello. Él escribía sobre la corrupción del espíritu humano, sirviéndose de Philip Marlowe como si de un ángel descreído se tratara.»George V. Higgins