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Sinopsis
La figura del pájaro es en sus poemas un símbolo, un símbolo de esperanza.
Nuestro pájaro interior es vulnerable pero en su fragilidad está su fuerza.
Porque la esperanza nutre nuestra alma.
Paula Bonet ilustra el poema de Emily Dickinson Tengo un pájaro en primavera aportando una mirada propia, una dualidad entre aquello que es frágil y se rompe, y nos rompe y la capacidad de seguir escuchando sus melodías y seguir en la espera más serena y apasionada.
La poesía nutre nuestras almas. En el mundo de hoy sigue siendo tan necesario como siempre lo ha sido o incluso más. Este acordeón contiene una antigua melodía, un pájaro que vuela, y que siempre vuelve.