Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia mientras navega. Las cookies que se clasifican según sea necesario se almacenan en su navegador, ya que son esenciales para el funcionamiento de las características básicas del sitio web. También utilizamos cookies de terceros que nos ayudan a analizar y comprender cómo utiliza este sitio web. Estas cookies se almacenarán en su navegador solo con su consentimiento. También tiene la opción de optar por no recibir estas cookies. Pero la exclusión voluntaria de algunas de estas cookies puede afectar su experiencia de navegación.
Imprescindibles
Las cookies necesarias son absolutamente esenciales para que el sitio web funcione correctamente. Esta categoría solo incluye cookies que garantizan funcionalidades básicas y características de seguridad del sitio web. Estas cookies no almacenan ninguna información personal.
No imprescindibles
Estas cookies pueden no ser particularmente necesarias para que el sitio web funcione y se utilizan específicamente para recopilar datos estadísticos sobre el uso del sitio web y para recopilar datos del usuario a través de análisis, anuncios y otros contenidos integrados. Activándolas nos autoriza a su uso mientras navega por nuestra página web.
Sinopsis
Poco después de la guerra de Secesión, un coronel empobrecido encuentra un diamante. Para ser exactos lo que encuentra es una montaña que es un diamante macizo. Lo mantiene en secreto y, explotándolo con inteligencia, se convierte en el hombre más rico del mundo. Retirado en el paraje recóndito que rodea su preciosa montaña , construye un palacio salido de un cuento de hadas. Allí procrea en aislamiento y su progenie crece y se reproduce. Los pocos invitados que acceden al fortificado y diamantino reducto quedan condenados a no salir jamás salvo con los pies por delante por temor a que desvelen el secreto. Hasta que llega el jovencito John T. Unger, originario de Hades. Ingenuo, deslumhrado por tanta riqueza, todo parece indicar que tampoco él se librará del aciago destino que le aguarda, pero a veces el destino tiene más facetas que el más grande de los diamantes...